Durante mi encuentro con el libro de preguntas y respuestas, una conocida, compañera en varias clases, se sienta cerca de donde estoy.
Aprovecho la ocasión. Se me da mal acercarme a gente desconocida, y ninguna otra cara me resulta amigable.
Y así, ella me dio
la información
Al menos Donuts no pretede ser guay y joven como el KFC España
Ah…un clásico del romanticismo. Por supuesto de la corriente más crítica a los ideales románticos. Siepre me gustó éste cuadro. Comparto la actitud de reírse del dramatismo excesivo. Cálmense un poco, no es el fin del mundo.
Sino el comienzo
Tengo una vecina muy anciana que pone la tele muy fuerte por las noches. Una vez fui a decírselo y se lo tomó muy mal.
(adición propia: me dejó bastante fría esta anécdota. esperaba más “chicha”)
Como me veía venir, conociendo la línea de trabajo de mi compañera,
el tema que me propuso fué el del suicidio.
El suicidio. Resulta el tema más sencillo y a la vez más complicado de casar con la esperanza.
Pero sin duda, no deja de ser interesante
Sin duda, por el título, no era lo que una podría esperar, pero sí fue lo único que podría haber sido.
Claramente, es una ayuda para el suicida y para gestionar y ejecutar su propia muerte.
Si bien no me parece que el humor sea una herramienta contra el sufrimiento tan buena como se plantea, algo de optimismo sí aportaba a mi búsqueda personal.
Al fin y al cabo, mis intenciones discursivas y artísticas parten de una mirada (actualmente) positiva sobre mis propios miedos. Miedos como el caos, la pérdida del control y del sentido en mis acciones.
Hallazgos entorno al suicidio (o todo lo contrario)